martes, septiembre 30, 2008

un sueño de niño


Un niño durante un sueño… A veces me dan ganas de ser un científico loco, con un laboratorio de ultima generación, apartado de toda moda y de todo afán social, y tener todos los implementos necesarios para crear y crear… mil cosas que nadie nunca ha tenido idea o a nadie se le han ocurrido… tener el laboratorio entre las montañas… un lugar escondido… que nadie sepa de mi ubicación, llevar una vida solitaria… sin comunicarme con mucha gente, solo con los leales… concentrarme en una sola tarea y trabajar con el resto de mis fuerzas por lograrlo… sin preocuparme de nadie mas… ni de lo que piensen de mi… ni de nada… sin problemas, solo con una misión… y que esa misión sea el objetivo de mi vida… ser duro, sin dar mi brazo a torcer… por ningún motivo, no rendirme jamás, no decaer, seguir investigando una cosa tras otra… una tras otra… analizar también los comportamientos y ser inteligente para saber inmediatamente “el efecto” que ocurrirá si la causa que se ejecuta es la situación “A” o la situación “B”… saber que nadie me recuerda… y con tranquilidad planificar y planificar, y tener todo a la mano para ello… todo lo necesario… tener un vehiculo veloz para ir a comprar… volver… comer poco… dormir poco… hablar poco con la gente… hablar mucho conmigo… frente al espejo o solo mientras estoy reparando algo… mirar mucho durante la noche las luces de la ciudad y del pueblo que esta cercano a las montañas… con un buen abrigo guardarme del frío… mojarme los zapatos en medio de la lluvia… mientras veo como la ciudad se aquieta llegando la oscuridad… creer que ellos no tienen idea que les estoy mirando bajo la lluvia fría… asechar… cazar ideas… mejorarlas y hacer el plan para ejecutarlas… con todas mis energías… con toda la concentración posible… tomar mi vehiculo y viajar por los caminos cordilleranos hacia otro lugar apartado también… mirar… reírme siniestramente… observar… callar… dar el golpe… y desaparecer… siempre pensé en que podría ser un buen soldado de la inteligencia militar… estudiar cada reacción, estudiar… estudiar… analizar… sacar conclusiones… borrar información… replantear conclusiones anteriores… tomarme el pecho y gritar entre las montañas con toda la fuerza contenida en mi corazón. Y desaparecer entre la niebla…

 

A veces soy un niño, que despierta cada mañana y lo golpea la verdad… creyendo que me falto jugar un poco mas en la niñez… pensando mientras me ducho que el sueño iluso que trajo el cansancio del día anterior podría reaparecer…

jueves, septiembre 11, 2008


II

Bajando del avión, tenia sus audífonos puestos, como los tuvo durante las 4 horas anteriores… en su mano un bolso de mano, dentro mil cosas y su pequeño notebook, desde donde había apreciado el pasado en fotografías y canciones que hoy no entendía, pero que despertaban su total nostalgia…

Tomo un auto: “al centro de la ciudad por favor” y se alejo rápido del aeropuerto.

Ella siempre fue tan auto analítica, pensaba mucho, disciplinada, pero sabia bien que necesitaba ayuda… sabia que tenia un trastorno o algo así… y solo por ello busco al mejor, y se tomo esos días para ir en busca de esa nueva opinión… creyó en que necesitaba esa 5º opinión experta…

Mientras avanzaba veloz por la carretera, ella contemplaba los árboles verdes como armonizaban alineados con los cerros… “naturalmente aquellos árboles fueron plantados por los campesinos del lugar... pero que lindos se ven en orden… en silencio mirando al cielo”… en medio de la nada…

Siempre quiso estar en medio de esos cerros cuando era adolescente… cuando con sus padres viajaba a la costa de vacaciones… siempre quiso volar entre ellos… siempre escuchaba música y miraba como es que en cada rincón del paisaje había un poco mas de vida, y un poco mas, y un poco mas, aun mas que lo que ella sentía dentro de si… y quizás esa era la razón por la que cada vez que viajaban quería escapar en medio de la carretera… adentrarse en los paisajes verdes y desiertos… para ver si un poco de esa soledad con vida la tocaba de una vez… y a hacia volar por el contorno de los cerros… hacia el horizonte naranja… que la llamaba...

“Siempre fui una soñadora” dijo en voz alta…
“¿disculpe señorita?” contesto el chofer del taxi.

“Nada, solo pensé en voz alta, discúlpeme usted” respondió ella… mientras se apoyo en el vidrio del taxi mirando el paisaje… sintió un poco de frío en su frente… sensación que bajo por sus mejillas hasta su cuello… tomo su bufanda y se acurruco en su lugar… intentando zafarse de aquella sensación…pero sin despegarse de aquel vidrio… que le fue familiar en aquel momento, por la sensación que le provoco… y que particularmente sentía en cada viaje que hizo en su juventud…

Cerro sus ojos y sintió confort en la tibieza de su ropa… como si estuviera separada de ella por un segundo… por aquel segundo de la sensación fría… y de la nostalgia…

Tenia entre las hojas de un cuaderno, una carta antigua… perfumada y muy elegante… la tomo entre sus manos, y supo que era un buen momento para deshacerse de ella… de aquellas promesas absurdas a estas alturas… de aquel pasado… sabia que ese no era un día normal… presentía que algo nuevo iba a escuchar con su tratante… algo que le cambiaria de perspectiva… y como ella siempre quería ir un paso mas adelante, no dudo ni un segundo en que en ese preciso momento tenia que dejar aquella carta… de momento abrió la ventana y un viento fuerte y frío golpeo su cara… su pelo castaño estaba siendo agitado por la brisa... y se movía de un lado para el otro bruscamente… ella caso la mano fuera del vehiculo… miro por un momento la carta que se quejaba de su destino frío… y observo que de pronto el sobre comenzó a rasgarse, se empezó a deshacer… y entonces la miro un segundo mas… para luego soltarla sin mas… no miro atrás como lo hubiera hecho cuando niña… esta vez no valía la pena hacerlo… y cerro el vidrio para volver a acurrucarse intentando contener el calor de su piel…

“que frío que esta afuera” le dijo al taxista…
“así es, esta temporada fue mas fría de lo común, y mas húmeda también” respondió él.
“wow, lo tendré presente para estos días” le dijo ella… mientras miraba el tapiz del asiento… cuero negro elegante y grueso…

Abrió su bolso de mano, y saco un libro que leía durante su viaje camino a la ciudad… y continuo su lectura… completamente despistada y sin prestarle atención… sabia que tendría que leer aquellas paginas nuevamente en otro momento, por lo que dejo el marcador donde estaba… le subió el volumen a su Reproductor de mp3 y aquel Taxi se alejo fugaz de aquella carretera fría… y de entre aquellos viejos cerros verdes… rumbo a su destino.


Una bocina le despertó sin piedad… ella abrió sus ojos asustada y miro alrededor… se dio cuenta que ya había llegado a la ciudad… “pero si solo me dormí un momento, que rápido llegamos aquí”… miro su celular para comprobar la hora, y noto que ya eran las 14hrs… por lo que saco rápidamente su pequeño notebook e inicio sesión… abrió su correo y envió un correo a su doctor… “Estimado Doc: llegaré a las 15hrs. Lo lamento, acabo de llegar a la ciudad y no tengo tiempo para ubicarme aun, le llamaré a la brevedad posible” – Enviar – y apago el equipo…

Saco un espejo y se miro un instante… intento limpiarse un poco cuando de pronto el taxista le indico su ubicación:

“estimada, ya estamos en pleno centro” “¿desea ir a un lugar en especifico?”
“muchas gracias, déjeme aquí, necesito un café primero que nada” – respondió ella –
“perfecto señorita, déjeme ubicar bien el vehiculo para que pueda bajar”
“que lindo que es el centro, muy ingles, muy europeo” dijo ella mientras guardaba sus cosas.
“es el barrio ingles, el ala oriente del centro de la ciudad señorita… espero disfrute la ciudad” le dijo el mientras terminaba de estacionarse… abrió la puerta y bajo a abrir la puerta de ella.
“muy amable caballero, aquí esta su dinero, que tenga buena tarde”
“igualmente señorita. Que le valla muy bien”

Ella se quedo en esa esquina un momento, haciendo un conteo de sus cosas y luego entro al café que se encontraba en la esquina del frente… se sentó en la barra y noto que aquella ciudad era muy particular… sintió esa extraña sensación de familiaridad nuevamente… aquella extraña sensación que sintió en el taxi también, y en el momento de contactar a aquel doctor… que ahora le estaba esperando…

Apago su mp3 y un largo suspiro escapo entre sus labios… llamo la atención de la barra sin dudas… era una mujer muy bella... y su perfume envolvió aquel local…